Cómo saber qué hipoteca puedo pedir?

Comprar una casa es una de las decisiones financieras más importantes en la vida de cualquier persona. Una de las primeras preguntas que surgen al empezar este proceso es: “¿Qué hipoteca puedo permitirme?”.

Responder a esta pregunta es fundamental para evitar una carga financiera excesiva y asegurar la estabilidad económica a largo plazo. Desde nuestro equipo de asesores hipotecarios, te ofrecemos una guía para que evalúes los factores clave que determinarán la hipoteca que puedes asumir y cómo tomar decisiones informadas.

Calcula tu ingreso neto mensual

El primer paso para saber qué hipoteca puedes asumir es calcular tu ingreso neto mensual, es decir, lo que recibes después de impuestos y otras deducciones. Esto incluye todas las fuentes de ingresos, como tu salario, bonificaciones o ingresos por alquileres. Contar con un panorama claro de tus ingresos te permitirá establecer un presupuesto adecuado. Para ayudarte, hemos creado un recurso gratuito con 20 preguntas y respuestas que te guiarán en la elección de la hipoteca ideal.

Evalúa tus gastos mensuales

A continuación, evalúa tus gastos fijos mensuales, como alquiler, servicios públicos, alimentos, transporte, seguros y otras deudas. Ser honesto y preciso en esta evaluación te ayudará a ver cuánto dinero tienes disponible después de cubrir tus necesidades básicas.

Determina tu capacidad de pago

Una recomendación común es destinar entre un 30% y un 35% de tu ingreso neto mensual al pago de la hipoteca. Esto incluye el capital, intereses, impuestos sobre la propiedad y seguro de vivienda. Puedes usar esta proporción para calcular tu capacidad de pago.

Por ejemplo, si tu ingreso neto mensual y el de tu pareja suman 4.000 €, tu capacidad de pago sería:

35% de 4.000 € = 1.400 €

Esto significa que podrías permitirte un pago mensual de hipoteca de hasta 1.400 euros.

Si ya tienes en mente una vivienda y necesitas saber si podrías asumir una hipoteca de 250.000 €, o incluso de 300.000 €, este cálculo te ayudará a estimar los pagos mensuales.

Ahorro para el pago inicial

El pago inicial es otro factor importante. Cuanto mayor sea el pago inicial, menor será la cantidad que necesitas financiar, lo que reduce tus pagos mensuales. Idealmente, deberías contar con al menos un 20% del precio de la vivienda como pago inicial, ya que los bancos suelen ofrecer mejores condiciones cuando se dispone de este porcentaje. Sin embargo, algunos prestamistas aceptan pagos iniciales más bajos, lo que podría traducirse en pagos mensuales más altos. Siempre es recomendable contar con un profesional que negocie en tu nombre para encontrar las mejores condiciones.

Usa simuladores de hipotecas

Hay varias herramientas en línea, como simuladores de hipotecas, que te permiten calcular cuánto podrías pedir prestado y cuál sería tu pago mensual aproximado. Estas calculadoras consideran aspectos como el tipo de interés, el plazo y el monto del pago inicial. Te recomendamos probar un simulador para obtener una idea clara de lo que podrías pagar.

Consulta a un asesor hipotecario

Finalmente, es muy útil consultar con un asesor hipotecario. Estos profesionales pueden ofrecerte una perspectiva personalizada y ayudarte en el proceso de solicitar una hipoteca. Analizarán tu situación financiera y te guiarán en la elección de las mejores opciones disponibles.

Conocer tu capacidad hipotecaria es clave para una compra de vivienda segura y sostenible. Al calcular tus ingresos, evaluar tus gastos y tener en cuenta el pago inicial, estarás en una mejor posición para tomar una decisión bien informada. Usa herramientas en línea y consulta con un asesor para obtener la mejor orientación posible. Así, podrás disfrutar de tu nuevo hogar sin comprometer tu estabilidad económica.